No cabe la menor duda de que con Zasalamel y Abyss, el Project Soul quiso repetir el éxito que tuvo en su día con Cervantes y Soul Edge, y es que ambos personajes se transforman en un ser esquelético infernal que son los respectivos villanos y jefes en Soul Calibur III y Soul Blade. Sin llegar a los niveles de calidad e impacto que supuso Cervantes/Soul Edge, Abyss resulta lo suficientemente convincente es su papel de jefe final con un diseño bastante original y unos golpes interesantes. Sus movimientos son una mejora respecto a Zasalmel, añadiendo algunos nuevos que se caracterizan por usar poderes mágicos o técnicas poco ortodoxas, incluyendo varios movimientos de presión y la capacidad de lanzar proyectiles en el ataque "Cosmic Bryo" (que no puede ser bloqueado si ser carga lo suficiente). |
|
|---|---|
| Valoración personaje usuarios: | |
| País de nacimiento: |  Desconocido |
| Estatura y Peso: | Desconocido |
| Estilo de Lucha: | Técnicas mejoradas de Zasalamel |
| Arma: | Guadaña |
| Fecha de nacimiento: | Desconocida |
| Familia: | Libre de conceptos sin significado como la familia |
| Seleccionable: | Soul Calibur 3 |
Soul Edge y Soul Calibur... Si un ser humano absorbiese el poder contenido en esas dos espadas…
Abyss se puso a trabajar en ello. Ninguna persona normal hubiese siquiera pensado en tal proeza, pero para Abyss se trataba de la oportunidad de alcanzar finalmente la muerte.
Durante la batalla entre la espada maligna y la espada espiritual, Abyss se ocultó y, cuando los poderes de ambas habían alcanzado el punto álgido, se dejó ver. Entonces utilizó un arte secreto para conectar su cuerpo con el mundo del abismo y crear una esfera de un negro azabache capaz de absorber todas las formas de energía. Planeaba utilizarla para extraer la esencia de ambas espadas y transferirlas a su propio cuerpo. Solo Abyss, con la sabiduría obtenida en una infinidad de vidas, podía haber realizado semejante hazaña.
Las espadas lanzaron haces de luz pura y dañina y, por un momento, parecieron luchar como si tuviesen voluntad propia, pero terminaron absorbidas por el cuerpo de Abyss. La energía recorrió todo su ser y el empezó a transformarse.
Tras una experiencia radicalmente distinta a la de sus continuos renacimientos, sus sentidos se agudizaron, su poder se acrecentó y su voz se hizo profunda como el eco de un rugido. Abyss pensó que, al adquirir este poder, su objetivo se había cumplido. La paz y la muerte que perseguía se encontraban ya a su alcance.
Pero en lo más hondo de su ser, un ente distinto estaba empezando a despertarse. En él había penetrado una energía que no era humana…
