Elysium es el jefe final del modo historia de Soul Calibur V bajo la figura de Sophitia, y como ocurriese con Inferno es capaz de adoptar cualquier estilo de lucha al comienzo, aunque con una diferencia: sólo puede imitar personajes femeninos. Pese a esto, experimenta algunos cambios cuando imita a un personaje en concreto, Pyrrha Omega, ya que mejora y aumenta algunos de sus ataques, cambiando incluso algunas animaciones. Algunos de los ataques mejorados son el "Apollyon Strike", "Nemesis Strike" o el "Deimos Strike". |
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| Valoración personaje usuarios: | |
| País de nacimiento: |  Desconocido |
| Estatura y Peso: | Desconocido |
| Estilo de Lucha: | Memorias de Soul Calibur |
| Arma: | Soul Calibur (variable) |
| Fecha de nacimiento: | Desconocida |
| Enemigos / Rivales: | Patroklos |
| Seleccionable: | Soul Calibur 5 |
Elysium es la entidad que dirige el portador del Soul Calibur, bajo la apariencia de Sophitia. En el modo historia, guió a Patroklos en su viaje para restaurar Soul Calibur. Quería que Patroklos resucitara Soul Calibur, con la esperanza de que al restaurar Soul Calibur a su máxima potencia, salvaría Pyrrha del malfestación. Esto condujo a Patroklos a conseguir los otros dos tesoros, Kali-Yuga y Dvapara-Yuga, que estaban en manos de Xiba y Leixia respectivamente. Después de la resurrección de Soul Calibur, Elysium aparece diciendo que con este poder, él podría salvar Pyrrha y el mundo de los males de Soul Edge y su portador, haciéndole empuñando Soul Calibur, diciéndoles: "Buen chico, estoy tan orgullosa de ti "y trata de convencerlo para matar a su hermana. Sin embargo, al final, se reveló a sí misma como una manifestación que Patroklos había creado con Soul Calibur. En Episodio 20, Elysium trajo Patroklos a la utopía bendecida y al ver que ya no era capaz de derrotar a Soul Edge, decidió usar su cuerpo para destruir el nuevo portador de la espada maldita. Sin embargo, Patroklos se negó y la derrotó en la batalla. A medida que su cuerpo se desintegraba y desaparecía, Patroklos volvió al mundo real, diciendo: "Adiós, madre".
