Revenant es uno de los personajes extra desbloqueables en Soul Calibur III, bajo el papel de sirviente de Zasalamel. Su diseño es quizás lo más destacable, ya que sus movimientos aunque originales, son bastante limitados, estando varios peldaños por debajo de los personajes principales. De todas formas como personaje extra no está mal, y es posiblemente de los más recordados. |
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| Valoración personaje usuarios: | |
| País de nacimiento: |  Desconocido |
| Estatura y Peso: | 1,83m - ??Kg |
| Estilo de Lucha: | Estilo "Mantis" (SC III) / Cervantes (SC IV) |
| Arma: | Espadas Aladas (SC III) / Esada-Pistola y Espada larga (SC IV) |
| Fecha de nacimiento: | Desconocida |
| Familia: | Desconocida |
| Aliados: | Controlado por Zasalamel |
| Seleccionable: | Soul Calibur 3, Soul Calibur 4 (*) * Jugable en el modo historia de Zasalamel |
Este hombre, ahora esclavo de Zasalamel y sus artes secretos, solía ser un hombre de fama dentro de los círculos de la sociedad. Pero nadie hablaba de su nombre. El mayor asesino de sus tiempos, nunca reveló su auténtico nombre a otros. Creció en los bajos fondos, e hizo lo que hizo falta para sobrevivir. Durante el proceso, se había convertido en un asesino de primer rango. Acaba con la vida de sus objetivos sin fallar, y si alguien intentaba traicionarlo, no mostraba piedad, e incluso hacia sus clientes. No servía a nadie. Muchas almas intrigantes han tratado de controlarlo. Sin embargo, si llegaban demasiado lejos una muerte segura les aguardaba. Finalmente ninguno de los que mantenían estos pensamientos lo intentaron, e incluso los hombres más poderosos le temían. Pero a medida que envejecía, el número de personas que le temían se redujo.
Un día un hombre joven apareció frente a él. En su mano tenía una enorme guadaña. Su ojo que brillaba de la forma más extraordinaria, fue la última cosa que vio Revenant… como ser humano. Cuando la guadaña rasgó su carne, fue el recuerdo de un hombre viejo que había matado. La gente se refería a él como un mago. En su última visión, Revenant vio aquél viejo hombre en los ojos del hombre joven. ¿Era éste hombre, quién tendría su venganza incluso después de la muerte, un auténtico hechicero?
Su vida terminó y sus recuerdos se congelaron.
Aproximadamente, diez años desde aquél día, parecía como si su decadente cuerpo esquelético lo hubiese olvidado todo. Posiblemente quede algo de su memoria en la profundidad de sus huesos, aunque no tiene la posibilidad de comunicarse con ellos. Un peón en la búsqueda de la vida eterna por Zasalamel, quizás Revenant también sueñe con el día en el que su búsqueda se complete, cuando se liberará de las cadenas de Zasalamel.
